La base de la gestión emocional es el autoconocimiento
Después de más de diez años como tutora y docente, he podido observar de cerca cómo los y las adolescentes transitan una etapa profundamente compleja, a menudo desconectados de su cuerpo y sus emociones. Les cuesta identificar lo que sienten, gestionar la frustración, sostener el conflicto o colocar límites claros.
Esta desconexión tiene consecuencias en su salud mental, en su forma de relacionarse y en la manera en que construyen su identidad.
Es por ello que nace en mí la idea de realizar talleres en centros educativos, desde del deseo profundo de ofrecer espacios seguros donde las y los adolescentes puedan explorar su mundo interno, adquirir herramientas y fortalecer su autoestima, su vínculo consigo mismos y con su entorno. Entiendo esta propuesta no solo como una labor terapéutica, sino también como una acción social, preventiva y transformadora.
Estos espacios están planteados con el propósito de
- Fomentar la conciencia emocional y corporal en la adolescencia.
- Desarrollar habilidades para gestionar las emociones, especialmente la frustración, la rabia y el miedo.
- Promover una autoimagen más compasiva y realista.
- Favorecer la expresión emocional a través de diversos lenguajes: el cuerpo, la palabra, el arte.
- Generar vínculos seguros dentro del grupo, desde el respeto, la escucha y la autenticidad.
- Potenciar el sentido de pertenencia y comunidad como antídoto frente al aislamiento.
El contenido que trabajaremos puede variar en función de las necesidades del centro, a grandes rasgos trabajaremos en conjunto
Conciencia emocional: qué siento, cómo lo siento, cómo expresarlo sin dañarme ni dañar
Focusing: prácticas de atención plena centradas en el cuerpo, para establecer contacto con el mundo interno de cada persona, identificar sensaciones, emociones y necesidades, y crear espacio para escucharlas sin juicio
Expresión emocional mediante el movimiento, la escritura libre, el dibujo y la palabra
Gestión de conflictos: exploración práctica de las habilidades sociales necesarias para la resolución pacífica de conflictos, a través de dinámicas grupales que trabajan la empatía, la comunicación no violenta, la escucha activa y la negociación
Mindfulness y prácticas de regulación emocional adaptadas a adolescentes.
Autocuidado: qué es, cómo practicarlo, cómo poner límites sanos desde el respeto.
Vida más allá de las pantallas: reflexión sobre la hiperconectividad, sus efectos emocionales y físicos, y la necesidad de recuperar el contacto con una misma, con el entorno y con la experiencia presente desde una perspectiva más consciente.
Autoimagen, identidad y pertenencia: cómo se construyen y cómo sostenerse con autenticidad frente a la presión social o de grupo.